Creo que algo importante para esta profesión es ser curioso.
Nuevas herramientas, plugins, técnicas, lenguajes aparecen casi a diario. Es recomendable permanecer con la oreja puesta en todas las cosas nuevas que van saliendo y merece la pena dedicarles algo de tiempo para entenderlas.
Lo malo y al mismo tiempo lo bueno de ser un programador front-end es que todo va muy deprisa. Esto significa que puedes convertirte en un experto pero puede que en lo que seas experto caduque rápidamente.
No necesitas saber todo, solo tener una idea sobre cierta técnica o tecnología. Ya habrá tiempo de sumergirse más profundamente cuando llegue la ocasión. Pero está bien saber si alguien te pide algo poder decir si se puede hacer o no en un determinado tiempo.
Newsletters a las que todo programador front-end debe estar suscrito: